Desinfectar una herida es limpiar los microorganismos que pueden haberse adherido a ella y así ya no se infecta.
Para desinfectar una herida primero hay que lavarse las manos con mucha agua y jabón, luego lavar la herida desde el centro utilizando gasas estériles, agua y jabón o agua oxigenada y suero pero nunca alcohol y retirarla de arena, cristales o algo que pueda dañarla. En caso de hemorragia utilizar unas gasas y presionarlas en la herida.
Luego aplicar un antiséptico con yodo y dejar la herida al aire si no es muy profunda y si la herida es profunda, o el corte es muy irregular, o se ha hecho con un objeto sucio, se debe acudir al médico.
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